POEMA: LA SENDA FINAL
“La senda final”: poema de Sol Benítez
(álbum de poesía “Rosas en el Fuego”).
La senda final
Algo húmedo penetra en mí,
algo punzante, oscuro, desconocido,
cuando de pronto pienso
-sin querer pensarlo-,
-sin remedio-,
que una tarde
-no sé si lejana o no-,
-no sé si temida o, quizá,
secretamente ansiada-,
simplemente no seré.
Pues una tarde cualquiera
me veré sola
en algún recodo
del camino inexplorado,
sin el peso de una sola lágrima;
quizá,
quizá sin recuerdo alguno;
tal vez sin siquiera comprender mi hora,
ni aferrar un ramo de esperanzas
contra el pecho húmedo,
cansado,
tal vez mudo en su fin,
ya muy lejano.
Me veré sola,
en algún descanso
frío, solitario:
Sin un rayo de sol trepando por mi espalda,
ni la blanca caricia de mi madre
abrigando el letargo;
sin la paz de unos versos
dulces que susurraba
al vaivén de la siesta,
en aquella infancia
ya olvidada.
Sencillamente
me veré sola,
en alguna esquina incierta,
alejada:
Sin que importe siquiera la pregunta
conocida y absurda
de mi eterno “cuándo, dónde, cómo”.
No es que teman mis huesos a la tierra,
ni al eco de unos pocos pasos tristes
arrullando el silencio de la piedra.
No es que no ame, ciertamente,
el cándido perfume
de una flor naciente,
veladora y frágil,
compañera en la sal
del abandono.
No es que me hiera pensar en Dios
como una infinita ausencia
o como ese misterio al que,
en caso de ser,
simplemente
no tenemos derecho.
Sencillamente hay algo
en esta noche lenta, callada…,
algo aún más sombrío
que la noche misma,
algo que muerde, que escarba
y se anida de pronto en mí
-vibrante,
hondo como una herida
inmensa, desconocida-…
al pensar de nuevo
-sin querer pensarlo-,
que una tarde cualquiera
me veré sola…
Pues en el dulce capricho
breve y confuso de la vida,
simplemente
no seré.
(Sol Benítez).
Gracias por leer el poema “La senda final”.
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